Al iniciar un proyecto, pocas veces pensamos en los riesgos para lograr el cumplimiento de nuestros objetivos. Sin embargo, es necesario realizar un análisis de las posibles adversidades que se pueden presentar a lo largo del tiempo.
¿A qué riesgos está expuesto mi negocio? Robo, accidentes, incendio, inundaciones, sismos e impago de los clientes, son algunos de los imprevistos que surgen en el camino y que pueden terminar de forma abrupta con el patrimonio en inversión.
Para ello, el sector financiero diseñó los seguros, que son el mecanismo financiero que ayuda a recuperar, de manera más rápida, las consecuencias económicas de los riesgos cubiertos.
Tipos de coberturas
Las empresas o personas que contratan una póliza pueden recibir indemnización por los daños causados por desastres o por causas ajenas a los mismos, siempre y cuando la empresa mantenga un correcto funcionamiento de su operación en sus instalaciones. No se paga por el desgaste natural del uso de la maquinaria, por ejemplo.
Afortunadamente, las aseguradoras han diseñado diversos esquemas de protección para amparar por los diferentes imprevistos que pudieran presentarse. A continuación, te recomendamos tres seguros para empresas básicos para tu negocio:
Cobertura de Responsabilidad Civil
Como su nombre lo indica, cubre los daños a terceros que pudieras causar ya sea dentro del inmueble, o bien, por la actividad económica que realizas. Es una cobertura básica y que por ley deben tener todos los negocios. Es decir, con esta protección podemos enmendar los daños que provoquemos a quienes están dentro del inmueble.
Por ejemplo, si alguno de los colaboradores, visitantes o proveedores resbala y se cae, se fractura o fallece al interior por alguna condición insegura de la compañía, eres responsable de indemnizarlo. Ante ello, un seguro de responsabilidad civil te ayudará a cubrir los gastos.
Seguramente habrás escuchado de esta cobertura al usar algún servicio de transporte, que es muy común en autobuses, aviones, ferrocarril o en barcos, donde por una suma asegurada se cubre a cada uno de los usuarios.
Seguro para “hombre clave”
Sin duda, todos los colaboradores son importantes para las empresas. Cada uno tiene una función específica y cubre necesidades laborales. Sin embargo, hay piezas clave dentro de la organización por el rol que desempeñan.
Para ello, las compañías han diseñado el seguro para “hombre clave”, una protección que cubre a personas que tienen funciones indispensables en el negocio y, dependiendo de la póliza, asegura la continuidad de la operación en caso de un imprevisto como el fallecimiento o incapacidad total de la persona asegurada.
En resumen, el seguro de “hombre clave” tiene como objetivo cubrir el desequilibrio económico que tendría la empresa si falleciera o se invalidara esta persona de relevancia en tu empresa.
Seguro de Crédito
En México y en el mundo, muchas empresas han quebrado por la falta de pago de sus compradores. El ejemplo más reciente lo vivimos en 2020, cuando el confinamiento obligó el cierre de negocios y más de un millón de Pymes, según datos del Inegi, desaparecieron.
El seguro de Crédito es una herramienta que ayuda a las empresas con sus cuentas por cobrar y vela por la continuidad del negocio. Esta cobertura cubre cualquier retraso en las cuentas por cobrar de las empresas y no se verán forzadas a realizar ventas adicionales o solicitar financiación en caso de sufrir un impago.
Además, el respaldo financiero de póliza de crédito permite a las empresas atacar otros mercados y aumentar la cartera de clientes con mayor agilidad, lo que posibilita un crecimiento acelerado del negocio, o dar pasos cruciales en su camino al éxito con mucha más certidumbre, por ejemplo, para comenzar a exportar.
Si deseas conocer más acerca de esta protección, en Solunion podemos ayudarte a encontrar la cobertura que tú y tu negocio necesitáis.
Recuerda que las compañías aseguradoras ofrecen coberturas de acuerdo a las necesidades de protección que requieras, por lo cual, es muy importante que al momento de contratar una póliza se conozcan todos los riesgos y los bienes a asegurar.
Recuerda que el seguro no es un gasto, sino una inversión.
