Hablar de FinTech es referirse a una industria naciente en la que las empresas usan la tecnología para brindar servicios financieros de manera eficiente, ágil, cómoda y confiable. La palabra se forma a partir de la contracción de los términos finance y technology en inglés.
De acuerdo con la asociación Fintech México, cuyo propósito es convertir al país en la capital latinoamericana y líder mundial en FinTech, México, Brasil y Colombia son los principales mercados FinTech de la región de América Latina, y durante el 2020 recaudaron más de 3 mil millones de dólares.
El gran talento e ingenio mexicano, combinado con la promulgación en el país de la primera Ley Fintech a nivel mundial, hicieron que el sector de las tecnologías financieras creciera poco más de 90% en tan sólo dos años, colocando a México como referente del mercado.
Con base en el Mapa FinTech elaborado por Legal Paradox, despacho legal especializado en este ramo, en el país se registran más de 752 entidades activas en el sector de tecnologías financieras.
Los tres estados con más empresas del sector son: la Ciudad de México (443), Nuevo León (67), y Jalisco (46). Asimismo, los segmentos con más actividad son: Lending (127), FinTech Tools 119), Wealth Management (79) y Payments (71).
Es cierto que el 2020, por todo el contexto de la pandemia, significó una oportunidad muy grande para estas empresas, pues la nueva normalidad impuso retos nunca vistos como el confinamiento y la sana distancia, en los que el sector FinTech pudo alzarse como la luz al final del camino, ya que, por ejemplo, se aceleró la adopción de aplicaciones que permiten el manejo del dinero, ante la necesidad de realizar operaciones a distancia.
Impulso de la inclusión financiera
Otro aspecto a resaltar es cómo el uso, cada vez más preponderante, de la tecnología en el sistema financiero puede ayudar a cerrar brechas en materia de inclusión financiera, algo muy necesario en el país.
Y es que la inclusión financiera es todavía un reto en América Latina, a pesar de que sus beneficios son claros: ayuda a reducir la pobreza y contribuye al crecimiento económico.
Sin embargo, en la región, el porcentaje de población adulta con acceso a una cuenta en el sistema financiero es de 54.4%, una cifra menor al promedio mundial (68.5%) y aún lejana del dato para los países de altos ingresos (93.7%), según el Banco Mundial.
El trabajo de las FinTech en la región se está enfocando en reducir esta brecha. De acuerdo con un análisis realizado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y Finnovista, 46% de estos emprendimientos ha centrado sus productos en aquellas personas y compañías, principalmente Pymes, que están sub-bancarizadas o completamente fuera del sector financiero.
En México, previo a la pandemia, sólo el 36% de las personas contaba con acceso a una cuenta bancaria, y el 63% de la población dependía del efectivo. Sin embargo, ahora el país ocupa el primer lugar en adopción de FinTech para pagos electrónicos en Latinoamérica y es el tercero en todo el mundo, únicamente superado por China y por los Estados Unidos, esto de acuerdo con el Índice Global de Adopción de Fintech 2019 de EY.
